Lic. David Faudoa Baeza
Socio Fundador de DFM LEGAL
06/03/2025
Pensión compensatoria y compensación económica: Figuras para mitigar el desequilibrio entre las partes después de separación o divorcio.
Al momento de una separación después de años de vida en pareja, ya sea en concubinato o matrimonio, es común que exista un desequilibrio económico y/o patrimonial entre las partes, éste generado en virtud que durante el tiempo en que los cónyuges hicieron vida juntos, uno de ellos se dedicó a crecer laboral, profesional y económicamente, siendo el proveedor del domicilio familiar, mientras que el otro cónyuge, generalmente la mujer en matrimonios hetero parentales, se dedicó preponderantemente al hogar, al cuidado de éste, de los hijos o de su pareja, situación por la cual, no creció en los ámbitos económico y laboral de la misma manera, generando que, al momento de la separación , uno de ellos cuente con trayectoria laboral y años de crecimiento, mientras que la otra parte se encuentra ante un total desequilibrio económico al no ser parte del mundo laboral, por lo que la pensión compensatoria, se genera y busca erradicar esta desigualdad, dándole la oportunidad a la persona que la sufre de mantener su calidad de vida el tiempo necesario para su reincorporación al mercado laboral.
Se genera por razones muy semejantes el derecho a una compensación económica, comúnmente generándose de la mano, esto cuando concluido un concubinato o un matrimonio bajo el régimen de separación de bienes, una de las partes tuvo la oportunidad de crecer económicamente y por ende, incrementar su patrimonio, mientras que la otra, al dedicarse al hogar no pudo hacerse de un patrimonio, existiendo un desequilibrio si lo contraponemos con el de su ex cónyuge, por lo que se busca con la compensación mitigar esa desigualdad generada por las condiciones del matrimonio y/o los roles de género tradicionales, trasladando judicialmente parte del patrimonio del ex cónyuge demandado al de la persona que se encuentre en desequilibrio.
Ambas figuras pueden demandarse y exigirse mediante un juicio ordinario familiar ante un Juez competente, con el fin de combatir las grandes dificultades de una separación cuando la economía y patrimonio de uno y otro fueran totalmente diferentes.
Lic. David Faudoa Baeza.